La vida concebida por un pintor mexicano Contemporáneo, revolucionario, que vivía la vida al máximo y con un mundo nuevo Shambaylla, alterna de todos los teoremas que se sienten cuando se pinta, y los pensamientos y frustraciones que se tiene como pintor, el como se vive de pintor, el como se piensa del pintor, todo lo que ve el pintor, lo que analiza etc.
-------------------------------------------------------------
Agradecemos que lean nuestros articulos aqui pondremos fragmentos del libro corazón de pintor
-------------------------------------------------------------
Tras aquellas paredes se escuchaba el movimiento de los pinceles, desesperados por ver una imagen en el lienzo, pasaban las horas y el artista seguía en su estudio, a lo lejos se escuchaba el ruido de los automóviles, de la gente desvelada que se hacían notar, y poco a poco iba tomando figura en el lienzo aquellos bocetos que días antes había elaborado el maestro.

Al terminar una textura o un color, no tiraba las sobras, ni las limpiaba, tenia unos pequeños lienzos a su lado en la cual hacia otros bocetos, estaba al unísono con ellos, parecía estar trabajando sobre 2 pinturas distintas, el genio ocupaba más papel para poner en claro todas las ideas que le iban llegando como bombardeos a su mente, él se mantenía contento y dichoso, cada trazo le daba satisfacción, cada color una alegría, y dentro de todo ello su amor hacia el arte hacia que todo el tiempo del mundo se le hiciere poco, no podía detenerse una vez empezado el lienzo, estaba enamorado, como aquel chaval que en la conquista de su musa, hace hasta lo imposible para concertar una platica con ella, una y otra vez el cuadro cambiaba de figura con el color nuevo que se le aplicaba al lienzo, el maestro constantemente le repetía a su esposa:

¡El lienzo es una mujer al que hay qué seducir con amor! ¡Nunca lastimarlo! como dice los mamarrachos del arte.

De pronto le llego el amanecer, no se había dado cuenta que había estado en su estudio un día entero, pero parecía no importarle ni causarle el menor cansancio.

- Trabajas demasiado Marito, le decía su amada Musa ¿como quieres tu desayuno?

- algo sencillo, hazme unas quesadillas, ya tiene años que no las como, desde que nos venimos del norte.

- hay amor / le decía su amada- si todos los días comes lo mismo, puras quesadillas y tu limonada, y en las tardes quesadillas y unas cervecita bien fría, solamente comes carne seca de la que tu fabricas porque las demás te parecen si sabor.

- así es Musa, me gusta solo lo que yo hago, la gente no le pone amor a las cosas que hacen para vender, tu sabes que somos rústicos y nos gusta preparar nuestras propias recetas. Si la comercializamos nos haríamos ricos ¿verdad amor?

- si Marito, pero primero debes estudiar y terminar tu carrera, yo tengo mucha fe en ti y en tus obras de arte, y para ello debes concluir por el bien de tus hijos.

- huy otra vez, además cuales hijos amor, primero que me los envié el de allá arriba, además no creo en él pero le doy las gracias por conocerte, y ya sabes que yo no necesito el titulo, me gusta pintar y es lo que me da la felicidad que necesito, además tu me quieres así como soy, no soy como los demás hombres, soy bueno. Y confío en mi genialidad como Artista Único en el Mundo, ni Dalí ni Picasso han dedicado tanto amor al arte como yo, ellos eran comerciantes insignificantes.

El pintor debe estar dedicado 100 % a la pintura en todo momento y todo lo que observa lo debe ver como composición, como textura con un pincel en los ojos. Debe apreciar lo bello de la vida, recopilar información en colores para plasmarlo al lienzo y dar vida a una obra bella.

Los pintores de ningún modo deben comentar que “pintan a ver que sale”, que “buscan y que a veces medio lo logran”, que están en la búsqueda, un pintor siempre encuentra en el arte, no hay búsqueda de cosas, hay hechos, esta el pintor solo frente al lienzo, el pincel y el color, un encuentro amoroso, donde se seduce la parte virgen del lienzo, y se entrega por total a la imagen que pronto aparecerá en él.

Uno de los problemas erróneos de los pintores, es que siempre dicen las frases típicas, a ver que sale, ando en la búsqueda, a ver que parece, a ver que pasa, a ver como reacciona la gente, a ver que me dicen, o a ver que entiende, siempre le preguntan a otra persona, ¿que crees que sea?, y le pone a la obra el titulo que le dan terceras personas o lo primero que se le ocurre.

El artista debe amarse así mismo, quererse mucho, para proyectarlo en su obra, respetar a su cuerpo, a veces nos cansamos de decirle a la gente lo que manifestamos, pero el mundo parece cerrar los ojos ante algo tan hermoso, el arte es la madre del universo, en lo bellos se refleja la luz que proyecta el infinito hacia nosotros.
“Cuando un hombre muere por lo que ama en la vida, vale la pena recordarlo para siempre con amor"

Mario De Rivera - Bueno Amor, creo que ya es hora de descansar, que comeremos.

¿Otra vez Marito? – no tienes llenadora –

Algo sencillo y que sea rápido unas quekas, ¿okas?
-------------------------------------------------------------
El Maestro pintaba sin cesar, en su estudio solo se escuchaba el deslizar de los pinceles, hasta que el maestro se había acabado sus ahorros, había dejado sus privilegios de pintar y pintar, empezó a buscar trabajo y se le dio algo sobre dibujo de estructuras, algo que ya había pasado en su vida y ya le parecía aburrido pues no es arte, el maestro una vez mas había caído a la civilización, a ser uno mas de la gran ciudad, en la rutina. El maestro se sentía desesperado al no poder ver un lienzo, al no poder oler esos colores aceitosos, tan ricos, se sentía oprimido y comentaba a su esposa:

- Me Siento morir, ya quiero pintar amor

- descuida Marito, tendrás un espacio para pintar,

- pero yo soy pintor amor, tengo que pintar –

El maestro lo decía en tono triste, y posándose en su cama no dejaba de llorar, de decir malas palabras y sentirse mal.

- He abandonado la pintura, le he sido infiel, me siento tan mal con ella que fue la que me ha dado la vida, la que me ha dado de comer, la que me dio todo, la que me acerco a ti. soy un malagradecido, un desgraciado decía, - a la vez que se tiraba al suelo a patear el aire –

Pero volveré a pintar, pintare porque soy pintor soy un gran pintor, el mas grande que ha dado Tecate, México,

¡NO!. El Mundo.

- Renunciare a mi trabajo Musa, porque quiero pintar y pintar, necesito pintar para poder vivir, para poder sentirme vivo, para agradecerle a Shambaylla y llevar el mensaje de amor hacia la humanidad.

Al día siguiente el maestro va a su trabajo y decide renunciar, y al llegar a su casa dice:

- ¡Vacaciones!, ¡Vacaciones!, ¡Vacaciones!

Estaba tan contento que empezó a repartir colores a diestra y siniestra al lienzo, que cada segundo era diferente, cada minuto parecían brotar del mismo aquellas formas tan hermosas que solo un diestro en el arte podrían hacerlo, era el maestro ahora era De Rivera, aquel rostro empezó a ser feliz, a estar contento, a sonreír, era aquel hombre sano que se había perdido entre los ciudadanos comunes, entre la civilización, y como el les decía: la chusma.

- estoy feliz amor, apunta esta frase que acabo de inventar: 

“la pintura es el arte de la felicidad”.

- ¡wau! Asombroso

- Y, yo pinto con el corazón, pinto el interior, mi mundo. Pinto lo que otros pintores nunca llegaran a ver en toda la eternidad, pinto Shambaylla, el maravilloso paraíso, mi sueño dorado de volver a aquella ciudad me hace pintar lo que recuerdo de ella, lo que siempre veo en ella. Algún día volveremos a Shambaylla llenos de amor y felicidad, y el pintarla me abre las puertas porque la muestro al mundo tal y como es. Una ciudad llena de luz y paz.